Bueno, no duraron mucho: el rayo de esperanza del Arsenal en la carrera por el título y la teoría de Roy Keane de que Erling Haaland es como un jugador de la League Two. Actuando con habilidad, hambre brutal y atributos físicos que la oposición no podía igualar, Haaland reafirmó su reclamo de ser el mejor. Y todo eso también era cierto para su equipo.
Demoler a los bien entrenados, siempre competitivos y a menudo complicados Wolverhampton Wanderers fue todo un declaración por parte del Manchester City, unas horas después de que el Arsenal pusiera en duda su nervio al vencer al Bournemouth en el partido anterior. Redujeron una brecha de cuatro puntos a un solo punto, tienen un partido pendiente y pueden liderar la tabla ganando su próximo partido, en Fulham. Y, con Haaland, tienen un talismán que está de vuelta en forma.
El noruego marcó cuatro goles en una ráfaga de 42 minutos, completando un hat-trick en un solo tiempo de juego por sexta vez en dos temporadas para el City, y aunque dos de sus goles fueron de penalti, fueron ejecutados de manera brillante. Los otros dos fueron de una clase indiscutible, un cabezazo de peso e inteligencia y un final enfático después de un toque exquisito. El Etihad disfrutó viéndolo de vuelta a su máximo nivel, y se quedó boquiabierto cuando intentó una chilena para convertir un centro de Phil Foden en el quinto gol de la manera más espectacular, solo para que Toti Gomes arruinara su diversión al despejar el balón con la cabeza.
En defensa de Keane, sus comentarios fueron específicos y se referían al juego general de Haaland en lugar de su capacidad goleadora, que no cuestionó, pero Haaland fue frío cuando se le preguntó si la opinión del exfutbolista convertido en comentarista lo había motivado. “No me importa mucho ese hombre, así que está bien”, dijo. La disputa que comenzó con su padre, Alfie, a quien Keane lesionó gravemente como jugador, sigue viva en el hijo.
Los Wolves intentaron combatir al City con compacidad y estrategias de contraataque, como hicieron en su sorprendente victoria por 2-1 cuando los equipos se enfrentaron en Molineux. El entrenador del City, Pep Guardiola, pareció pensar que eso les causó dificultades y no estaba contento con las veces que su equipo perdió el balón en el primer tiempo. Pero Gary O’Neil, del Wolves, sintió que su equipo fue superado, lo cual parecía ser la opinión más acertada. Un aspecto subestimado del City es su trabajo sin balón y, aunque su pase no estuvo en su mejor momento, su presión sí lo estuvo. Las camisetas azules rodearon a las rojas en una tormenta sofocante, el City exhibiendo niveles de energía asombrosos para un equipo que disputaba su partido número 55 de la temporada.
Josko Gvardiol siguió presionando a Rayan Aït-Nouri, Kevin De Bruyne estaba en todas partes con Toti Gomes y Bernardo Silva parecía capaz de acosar a tres jugadores al mismo tiempo. Incluso Haaland se mantuvo ocupado cerrando a los jugadores contrarios.
Su gol en el minuto 12 llegó después de un pase magnífico de Foden a Silva, quien jugó un pase inteligente desde la línea de fondo detrás de los defensores del Wolves. Gvardiol se acercó para disparar y Aït-Nouri intentó golpear el balón, pero falló y chocó con el croata. El penalti parecía bastante claro, pero Craig Pawson necesitó la confirmación del VAR. Después de esperar más de dos minutos para la revisión, Haaland colocó el balón, puso las manos en las caderas, respiró profundamente y lo lanzó, mostrando su habilidad para golpear el balón con la misma potencia que otros jugadores solo logran al patearlo con fuerza.
Fue el decimoquinto penalti exitoso de los 17 lanzados por el City. Un decimosexto de 18 seguiría y entre ellos estaba uno de sus mejores goles en un tiempo. Después de más presión de Silva, Rodri se lanzó para despojar a Matheus Cunha y le pasó el balón a De Bruyne. Rodri continuó corriendo, yendo por fuera de De Bruyne, quien lo encontró con un pase preciso, y él envió un centro al poste trasero. Allí, elevándose por encima de todos y juzgando perfectamente los ángulos, Haaland colocó un cabezazo de vuelta hacia José Sá y dentro del poste lejano.
El movimiento también ejemplificó cómo el City pudo superar la defensa compacta del Wolves por los costados. Sá ya había realizado una gran parada a un cabezazo de Haaland después de un centro de Silva desde la derecha. Pero los Wolves también demostraron ser vulnerables a los ataques por el centro, con Foden driblando por su centro pero perdiendo el control del balón cuando llegó al área.
Luego, por el mismo canal, irrumpió Haaland, persiguiendo un pase en profundidad. Con una velocidad y potencia visceral, superó a Nélson Semedo quien, dentro del área, lanzó una pierna desesperada y golpeó la espinilla derecha de Haaland. Sorprendentemente, Pawson no señaló el penalti inicialmente, solo lo hizo después de ser enviado al monitor del VAR. Una vez más, Haaland ignoró la demora y convirtió el penalti hacia la izquierda de Sá.
La segunda mitad culminaría con Mateo Kovacic despojando a João Gomes y Rodri jugando a Julián Álvarez en el espacio del área, el argentino anotando un final experto para el 5-1. Pero comenzó con el único momento en el que el City se relajó y el sustituto animado del Wolves, Jean-Ricner Bellegarde, superó a Gvardiol para lanzar un centro buscando, que Ederson solo pudo despejar a Hwang Hee-chan, quien anotó un buen gol.
Pero el marcador se mantuvo 3-1 por no más de 59 segundos. Ederson jugó entre líneas a Foden, quien se adentró y lanzó un pase fabuloso a Haaland, quien controló con el exterior de su pie izquierdo mientras saltaba para alcanzar el balón. Fue una jugada atlética inimitable y lo que vino después también fue Haaland en su forma más pura. Con un golpe de su bota izquierda, envió el balón girando hacia la esquina superior. Si Keane tiene razón, definitivamente es el jugador del año de la League Two.
Jugador destacado: E Haaland (Man City)
Manchester City (4-2-3-1): Ederson 7 — K Walker 8, M Akanji 8, N Ake 7, J Gvardiol 8 — Rodri 8, M Kovacic 7 — B Silva 8, K De Bruyne 7, P Foden 8 — E Haaland 9
Wolverhampton Wanderers (3-4-3): J Sa 6 — Bueno 6, M Kilman 6, T Gomes 5 — N Semedo 4, J Gomes 6, M Lemina 4, B Traore 5, R Ait-Nouri 5 — Hwang 7, M Cunha 6